Aun dolía, pero era distinto. Verte de esa forma terminó de destruirme pero también de abrirme los ojos. Tú no eras para mí, aunque me resistiera, aunque quisiera forzar todo, aunque por momentos te deseara con ganas desesperadas... Jamás serías para mí.
Esperaba una respuesta, pero ya sabía que no la tendría y al confirmarlo supe que no podía seguir huyendo de la realidad, todo estaba tan claro, era hora de decirte adiós en silencio, de dejarte ir y sanar a tu manera.
Esta vez no tenía ni las fuerzas ni la voluntad de ayudarte, no me gustaba la persona en la que me convertí por quererte...yo también necesitaba cambiar, necesitaba volver a creer, aprender a confiar.
Ya no tenía sentido pensar o tratar de explicarme en qué momento y por qué nos perdimos. Entendí que la única salida a todo esto era comprender que nunca existió un nosotros...
De pronto sentí que no tenía nada más que hacer aquí. Sentí la lejanía teniéndote a mi lado, aquella distancia que me hizo detestar aquel último beso. No te sentí...sabía que ambos nos habíamos perdido.
Te dejo... porque no tengo nada más que ofrecer, porque tampoco puedo prometer, porque no quiero que me prometas nada, porque tampoco podrías hacerlo, porque no puedo confiar. Y lo haré en silencio...te miraré de lejos y desearé que algún día puedas decir que lo lograste. Deseo, con todo el corazón, que aprendas a amar, que no te niegues a hacerlo, que no hieras a nadie más al tomar ese riesgo. Amar implica asumir riesgos, dejar de lado los temores, poner las manos al fuego y mostrarse desarmado. Tenias que aprender a amar y no seria yo quien te enseñaría a hacerlo. No podía ser yo, porque aunque no quisieras aceptarlo, nunca pude ganarme un lugar en tu corazón. Y ya no quería seguir luchando...te perdí sin tenerte...y esta vez no te quiero recuperar.
A mi modo de ver, en la misma semántica del verbo amar describe un evento atélico: es imposible dejar de amar. Y el amar es algo que se construye solo en el largo tiempo, y es por eso que el fin mismo del amor es el amor. En lo personal, valoro mucho ese verbo. Buen post.
ResponderEliminar