Su mirada cristalina, faroles que alumbran de noche, baúl de secretos, refugio de atardeceres inconclusos. Letras que se deslizan, palabras que no se pronuncian, oraciones sin punto final...la infinidad del suspenso y mi jugada clave: la omisión.
Tentación...Cruzar límites que no establecimos, desafiar compromisos que no reconocimos, romper un nosotros que nunca existió.
¿Qué puedo salvar de esto, corazón?
¿Alguna vez hubo algo que salvar?
No hay comentarios:
Publicar un comentario